Vivir no es sólo existir

Hola todos, gracias por leerme y así acompañarme en este viaje. Cuando me fui por primera vez lo pensé como un 'voy y vuelvo'. Algo finito, aunque largo. Hoy veo que estoy viviendo esto y después estaré viviendo otra cosa. Viajo para conocer lugares, costumbres, horarios, comidas, ritmos, gente, calles, Dojos, maestros, compañeros, trenes, redes de metros, culturas.
Hoy el objetivo del viaje, si bien tengo un plan sobre el que improviso, es viajar. Si es posible trabajar en distintas ciudades para, 1) financiar el viaje y 2) entrar bien en el ritmo local, no ser sólo un turista más.
Este texto lo voy a expandir en la entrada 'Inicios y Motivaciones'

lunes, 16 de mayo de 2016

130-Hashimoto 09~15/may - cada día más keiko, se vienen los festejos



SEMANA 2:
09/05 – 15/05

Lunes 09: Meiji
Esta mañana iba a ir a Shinjuku, en Tokio a buscar dónde hospedarme en junio. Pero me puse a buscar en internet y encontré muchas páginas, les mandé maila  varias, me quedé escribiendo y comiendo hasta la hora de la clase. Hoy no hay actividad en Hashimoto Dojo, pero vamos a la universidad Meiji, donde Sensei va todos los lunes. Salimos los tres desde el Dojo. Hoy hay dos eventos especiales en la clase. Primero, Jenny va a impartir 30 minutos de preparación física extrema, después, Asano-kun, el capitán del club, va a hacer su examen de 2do dan. Primero fue el examen. Empezó con armas. Hace dos años había más disciplina en los chicos, más nivel, más danes. Sensei tenía una dorpresa para el examinado. Cuando le tocó la parte de desarmar a un atacante con tanto (cuchillo) y boken (espada de madera) le pidió a Jenny que sujete el arma. Ella es muy fuerte, firme y precisa. Bajo la instrucción de atacar en serio, son colaborar con la técnica, pero con la intención de cortarlo, Asano-kun quedó en blanco. No pudo ejecutar ni un lance ni una retención, ni sacarle el arma. Claro que Sensei no esperaba que pueda, pero fue un desafío mental.
Después vino la preparación física de Jenny, fuera hakamas. Correr hacia adelante y atrás con la punta de los pies sin apoyar los talones, correr de lado cruzando el pie derecho por delante girando la cadera y volver cruzando el izquierdo por detrás, media luna con puños, cuerpo a tierra, ukemi control del peso con el compañero en posición de banco y nos sujetamos a su tronco con los brazos manteniendo la vertical boca abajo y luego cayendo con ukemi lateral; todo esto fue a lo largo del tatami que es muy largo, como una cancha de básquet. Después trabajos de fuerza con el compañero: una rodilla al piso y el otro pie apoyando, juntamos palmas con el compañero, saltamos al mismo tiempo y cambiamos los pies en el aire; abdominales; espinales. Finalmente 1 minuto para ponerse la hakama. Saludamos, Sensei dio una charla post examen y nos fuimos.
El primer tren estuvo muy lleno, fuimos parados, pero rápidamente cambiamos e hicimos cómodos la mayor parte del recorrido. Con mucha hambre entramos a un restaurante cerca de la estación y comimos. Caminamos hasta el Dojo y nos separamos hasta mañana. En el depto, Irie-san no había vuelto aún. Organicé todo para dormir, limpié un poco, me duché, lavé los dientes y me senté a usar la compu, pero me caía de sueño. Actualicé las cuentas y a dormir.

Martes 10: empuñadura
Irie-san se fue a las 5:30am. Anoche no lo escuché llegar. Me levanté a las 8, desayuné, puse a lavar la ropa, escribí, colgué la ropa y me puse al día con el diario. Almorcé udon con soja y huevo y una tostada. Terminé de subir los artículos al blog y me puse a estudiar. A las 4 llegó Irie-san, cansado de sus dos trabajos. Transcribí una lección y guardé todo. A las 6:20 salimos para el Dojo. Antes de la clase practicamos el 36 no jo ken awase con Jenny e Irie-san. Él guió la entrada en calor e Igarashi Sensei dictó la clase. El foco estuvo sobre kokyunage e ikyo desde tainohenka y kirikaeshi kesagiri awase sabaki kata, acá Sensei me corrigió la sujeción (no desparramar la mano sobre el ken, mantener el puño cerrado. Nos dio 10 minutos de trabajo libre, lo saludé al senpai de la clase  y trabajamos tenkan. Esperaba que después de la clase nos toque una sesión de ukemi con Utani-san, pero no fue. Tomé una taza de té y me fui a una esquina a practicar suburi de ken. Jenny e Irie-san volvieron a practicar el kata de antes de la clase. Sayonara y hasta mañana.
En el depto nos duchamos y cocinamos por separado. Yo freí la soja, la supergí en agua irviendo, le agregué especias, una porción de udon y un huevo. Cené con un pan. Escribí un poco y a dormir.

Miércoles 11: Tokaichiba
5:30 arriba, un pan y al Dojo. Clase de Satou-san. Kokyunage y jo-nage. Después de la clase practicamos ryotedori kokyunage con resistencia máxima con Asano-san, el capitán del club de Aikido de Meiji. Desaprobó el examen de 2do Dan el lunes y ahora ambos estamos entrenando para lo mismo. Después hicimos algo de kaeshi-waza y se puso a  hablar con Suwa-sensei. Guardamos todo y nos fuimos. A las 2 tenemos keiko extraoficial. Desayunamos en el depto, dormí una siestita y fui a hacer compras. Gasté bastante, pero espero me alcance para 5 días. Me puse al día con el diario y nos fuimos. Keiko de 2 a 3:15. Jenny y Machiko-san hicieron el 36 no jo ken awase y los kumitachi tai no ri, Irie-san y yo los kumitachi ken no ri. Después Sensei nos cortó las armas y nos pidió ni nin dori. Primero fue Machiko-san con Jenny e Irie-san de ukes, después ella se sentó y quedó de nage Jenny, yo me sumé y con Irie-san la hicimos trabajar. Es difícil moverme cuando me planto, así que es buen trabajo para ella, finalmente lo logró una vez. Descansamos un rato hablando con Sensei, le ofrecí darle mi regalo, pero me pidió que lo guarde para el campamento. Le propuse la idea de Daniel Sensei, de hacerle un facebook oficial y publicar su último año y medio de viajes por el mundo enseñando Aikido. A Jenny le pareció una buena idea y entre los dos lo incentivamos. Agradecido accedió, Igarashi Sensei se hace famoso!
A las 3:40 salimos los tres deshis (Jenny, Irie-san y yo) a la estación de Hashimoto, fuimos a entrenar en el Dojo de Irie-san. Ahora que se puso serio tiene su lugar, por el momento sin alumnos, así que vamos a entrenar frente a la ventana para hacer de exhibición. Antes de tomarnos el tren Jenny nos invitó un café por haberla ayudado con su práctica. Si bien todos estamos entrenando para nuestro próximo examen, ella y Machiko-san son quienes tienen una fecha definida pronto. El Dojo está en un centro comercial cerca de la estación de Tokaichiba, muy lindo lugar. Armamos el tatami, nos vestimos de aikidokas ya  entrenar. Todo armas por dos horas, los tres clásicos de la semana: 36 no jo ken tai jo, kumitachi ken no ri y tai no ri. A la vuelta Jenny nos invitó la cena, la semana pasada, cuando llegué yo, invitó Irie-san, la semana que viene me toca a mí. Rica cena y buenos precios, acá los traeré a los chicos.
Nos separamos en el Dojo, en el depto nos duchamos por turnos y nos sumergimos en nuestras laptops, él a escribir algo del Dojo y yo completar el blog. Le escribí a Recep para que me aconseje sobre ser uchi-deshi en Tokorozawa. Lo conocí hace dos años, inició su práctica de Aikido con Igarashi Sensei, luego fue uchi-deshi de Kobayashi Sensei por 3 años, hoy ya no vive más en el Dojo. No me respondió, estaría durmiendo.

Jueves 12: Tokorozawa
Calle comercial en Tokorozawa

Desde el lunes que fue la clase especial de Jenny en Meiji me sangra el dedo índice izquierdo. Se me abrió la piel al hacer medialunas con los puños. Siempre me pongo una curita durante la práctica y lo dejo respirar el resto del tiempo. Pero no fue suficiente. Esta mañana después de doblar el futón encontré una mancha de sangre en el edredón. Lo voy a cubrir siempre ahora. Desayunamos por turnos, Irie-san lavó la ropa, la colgó y se fue a trabajar. Yo lavé la funda del edredón y lo colgué. Me respondió Recep, todavía estoy a tiempo de solicitar ser uchi-deshi en Tokorozawa con Hiroaki Sensei, esta noche paso por el Dojo. Después vi el último episodio de Juego de Tronos y me puse a escribir. Volví a enfundar el edredón y preparé el almuerzo. Primero herví unas vainas mientras cortaba cebolla, morrón verde y hongos. Me comí las vainas a la vez que hervía en poco agua lo cortado, luego agregué udon y finalmente un huevo. Almorcé viendo videos en YouTube, lavé y me puse al día con el diario. Ubiqué el Dojo de Tokorozawa y el hostel en Shinjuku que quiero ir a preguntar. Es el más barato que encontré y por internet sólo se puede pagar con tarjeta. Estudié japonés hasta las 5:30 y me fui a Tokorozawa Dojo. Entre que busqué el recorrido y el precio me perdí un poco. Para ir hay que cambiar tres veces de trenes, después del segundo cambio paso de la línea Yokohama a la Seibu, o sea que no podía comprar un boleto por la totalidad del viaje, tuve que comprar lo justo, salir de la estación, volver a comprar y viajar en otros dos trenes. Lo lindo fue que me bajé antes de tiempo, temía que, por ser el expreso, se pase de mi estación. Pero el camino hasta el Dojo desde donde me bajé fue de media hora. Llegué a mi destino media hora después de iniciada a clase. No entré. Fui a descansar al parque y volví media hora antes de que termine. Lo identifiqué enseguida a Mikio Sensei, él no se acordaba de mí y me pidió disculpas. Me invitó a pasar y me sentó en un almohadón en el vestuario que da al tatami. Vi el final de la clase. La única que me reconoció en seguida fue Hiromi, es muy simpática y amigable, compartí varios momentos con ella hace dos años en mis visitas al Dojo, el cumpleaños de Recep, y una vez que fuimos varios a cenar al departamento de uno de los alumnos. Después de la clase ayudé a poner la mesa del té y me senté. Sensei se sumó después de los ukemis. En Tokorozawa Dojo hay una tradición de hacer ukemis ida y vuelta con un nage y tratar de superar tu última marca. El promedio es 30, varios tienen un promedio de 50, cuando Recep se fue del Dojo, su despedida de 3 años de uchi-deshi fueron 300 ukemis, una bestia. [Ukemi, en este caso, es rodar hacia adelante desde parado y volver a levantarse con el impulso de la caída.] Mientras lo esperábamos a Sensei hablé con los uchi-deshis, uno de Suecia, dos de Hungría y una de China. Ninguno de ellos estará cuando yo empiece mi estadía. Mikio Sensei dijo que estoy a tiempo de solicitar uchi-deshi, que hable con Hiroaki Sensei la semana que viene. Anotó mi nombre y la fecha en la visité y le mandó mail a Dojo-cho (el líder del Dojo).  El jueves estoy de vuelta. Quedé con Hiromi en ir juntos a Hombu el lunes. Ambos nos tenemos que levantar a las 4am para llegar a la clase de las 6:30.
La vuelta a Hashimoto fue más rápida que la ida, o eso me pareció. Ahora estoy otra vez cómodo con el recorrido. Pensé en comprar un bento con descuento en el súper, pero ya estaba cerrado. Pensé en comprar un plato barato en un restaurante, pero no quería gastar y mientras me decidía cerraron todos, pensé en entrar a la tienda de conveniencia a comprar algo barato para comer, pero no lo hice, llevo una semana en Japón sin entrar a una y lo quiero mantener así. Como me lo esperaba, Irie-san estaba durmiendo ya. Me saqué el pantalón pero me dejé las medias, para no hacer ruido. Crucé la habitación, expandí el futón y metí la remera que me saqué en la bolsa de ropa sucia, me llevé la toalla, un calzón limpio y el jabón a la cocina. Me comí un nigri mientras repasaba mis redes sociales. Me duché, revisé un poco más el teléfono y me fui a dormir después de cruzar nuevamente la habitación.

Viernes 13: información
Arriba a las 7:30. Desayuné a las 8, a las 8:40 Irie-san se fue a trabajar. Puse la compu y a organizar la llegada del grupo de argentina. Preparé el cronograma, leas mandé algo de información. La idea de Daniel Sensie dio sus frutos, anoche creó la página de Igarashi Sensei, me hizo administrador y esta mañana invité a que le den Me Gusta a todos mis contactos aikidokas del mundo. Me dio hambre otra vez, pero me quedé en la compu tomando agua, esperé a la hora del almuerzo para no comer tanto y gastar menos. Corté cebolla, morrón, pepino y hongos, los freí en la cacerola, le agregué agua y le tiré los fideos soba que compré había comprado ayer. En ese momento me llegó un mensaje de Jenny para ir a Starbucks a editar juntos el boletín informativo en inglés de todas las actividades de Igarashi Sensei desde el sábado 28 de mayo. Le pedí 10 minutos, terminé de cocinar, vertí mi almuerzo en el tazón, lo cubrí con papel film y me fui al Dojo. Caminamos juntos hasta Starbucks, ella se pidió un doble expreso y yo un frappuccino de chocolate. Esta mañana ella se reunió con Sensei y él le dictó todo lo que debe poner. Tenemos que crear un pdf preciso, conciso y fácil de entender que cubra los eventos del 28, 29, 30 de mayo, 2, 4 y 5 de junio en inglés. Eso se va a imprimir para entregar a los aikidokas, se va a mandar por mail a las escuelas visitantes y hasta puede que se cuelgue en su página de Internet. Lo completamos, nos quedaron dudas, Sensei lo verá y le daremos el toque final. Después de eso le voy a revisar la gramática y se imprime. Volvimos al Dojo a las 4. Yo volví al depto, Irie-san había vuelta y se estaba terminando de ducharse. Yo comí la mitad de mi almuerzo y guardé el resto en la heladera para la noche. Me duché yo también y salimos a las 4:45. Llegamos al Dojo, estaba todo limpio, Jenny es una buena uchi-deshi. A las 5:10 empezaron a llegar algunos nenes. Finalmente fueron 5, uno de ellos, Ren, llegó en bicicleta y se cayó en la puerta, Jenny le puso curitas gigantes en las rodillas y a cambiarse. La clase incluyó saltas y pasar por debajo de palos acostados, correr en zigzag, shomen-uchi kaitenage, tsuki kotegaeshi, carretilla, ukemi y saltos. Terminó la clase, limpiaron el tatami y se fueron.
Nosotros tuvimos media hora de espera hasta nuestra clase, estiramos, practicamos solos y se hicieron las 7. Irie-san dirigió la entrada en calor. Igarashi Sensie empezó con tainohenka, esta vez la tomo a Jenny de uke toda la clase, normalmente lo sacaría a Irie-san. Después trabajamos sobre ushiroryotedori (sujeción de ambas manos por una persona por detrás) y su aplicación para ninindori (sujeción de ambas manos por dos personas). Fue difícil e interesante. Me mandaron al grupo de tres con Masaru, el japonés alto como yo que tanto ukemi me enseñó hace dos años y otro japonés casi tan alto como nosotros, éramos los monstruos.
Terminada la clase limpiamos, preparamos el té y Jenny y yo tomamos y comimos con Sensei hablando de algunos temas a resolver. Después limpiamos nuestras tazas y practicamos ushiroryotedori juujinage (lance con los brazos en cruz). Sensie nos corrigió 4 veces. Es difícil el estilo Igarashi, y es buenísimo.
Terminado todo Le entregué su regalo a Masaru y Kaoru, nos sacamos más fotos con ellos. Son buena gente. Nos fuimos. En el depto Irie-san se dio un baño, yo cené mis sobras, me duché y me puse a escribir con un té y chocolates. Él a ver baseball. A dormir alrededor de las 12.

Sábado 14: almuerzo
Unos mates después de la comida
Quedé en que después de la clase de la mañana limpiaba los ventiladores, asumí que no desayunaría hasta terminar eso, así que me comí un nigiri antes de salir. A las 6 estábamos en el Dojo. Clase de Igarashi Sensei. Continuamos con lo que veíamos viendo de ushiroryotedori. Pasamos por juujinage, kokyuho, ni-nindori. Terminamos con boken, kirikaeshi awase caminando. Después de la clase limpiamos, a la mañana no se pasa el trapo, es más rápido, esta vez me tocó la aspiradora. Preparamos el té y le pregunté a Sensei cuál es el plan para el grupo de Argentina en la All Japan Aikido Demostration, se lo explicó a Irie-san, algo entendí, él me lo explicó como pudo y nos pusimos a practicar. Jenny ya estaba con Asano-kun, de Meiji, yo lo saludé a uno de los terceros danes que no me acuerdo el nombre, un japonés robusto y fuerte. Le pedí técnica de examen para 2do Dan, Kaeshiwaza desde ikyo, konegaeshi y nikyo. Sensei dio por terminada la práctica extra. Los Meiji se quedaron un rato charlando, yo mientras empecé a limpiar uno de los ventiladores. Irie-san me ayudó sosteniendo la aspiradora, Jenny quería ayudar pero no había lugar para 3 personas en es simple tarea, se quiso duchar pero una de las Meiji era mujer y no podía usar la ducha hasta que ella se vaya. Limpió el piso cuando nos movimos al otro ventilador. Sensei nos mandó a casa. Desayunamos, yo arroz con nato (unos frijoles pegajosos que huelen horrible), e Irie-san cereales con yogurt.
A las 10 volvimos. Subimos a la casa, limpiamos un poco y ayudamos a mover todos los vasos y adornos de un cuarto a un mueble en el living. Esto mismo lo hicimos la semana pasada porque movieron ese mueble, ahora otra vez. También ayudamos a colgar tres cuadros. A las 11 bajamos al Dojo a entrenar para el examen. Igual que la semana pasada, esta vez sensei vio que nos costaba adoptar el hanmi (postura lateral) y nos hizo hacer los katas de boken (formas de sable) con naginata (albarda japonesa). Entrenamos poco más de una hora. ‘Lávense las manos y suban’, nos dijo. Tenían preparados en la mesa cinco potes de madera con comida, nos invitaron a almorzar. Muy rico, 4 variedades de arroz con pollo, vaca, vegetales y anguila. Después de comer me pidió Sensei que prepare un mate, usamos el que le regalamos para uno de sus seminarios en Argentina y yerba Rosamonte. Machiko-san me siguió con atención para aprender a hacerlo. Sólo hicimos una ronda y nos fuimos. Esta tarde Sensei no está, la clase la dicta Irie-san. Quedé con Jenny que vuelvo una hora antes de la clase para limpiar el otro ventilador. En el depto me senté con la compu y me quedé dormido. Una siestita y volví a escribir. Puse el diario al día y empecé a redactar las reglas de comportamiento dentro del Dojo para mandar a los chicos. A las 3:55 fui al Dojo, limpié el otro ventilador y el vestuario. Llegó Irie-san y nos cambiamos para la clase. A las 5 empezó. Los sábados vienen los chicos que acaban de pasar de la clase de niños a la de adultos. Irie-san los tomó de uke e hicimos kihon (básico) toda la clase. Después tomamos el té con los últimos dulces finlandeses e irlandeses, mañana abriremos un nuevo paquete.
Mi soba
Nos fuimos y la dejamos a Jenny descansar. Yo volví al depto a ducharme y él fue al minisúper. Cociné mientras él de bañaba. Cené y me puse con la compu. Diario al día y listo el informativo para vivir en el Dojo.

Domingo 15: Katori
Arriba a las 7:30. Desayunamos y salimos para el Dojo. Ya estaba todo limpio, nos cambiamos y esperamos a los niños. No sé qué pasa con estas clases. Hace dos años eran mucho más concurridas. El primero en llegar fue Sora, él empezó durante mi primera estadía en este Dojo. Es uno de los más dinámicos y decididos de la clase y aprende rápido. Era el único, siempre juegan a pasarse una pelota antes del inicio de la clase, jugamos juntos unos 10 minutos hasta que llegó el resto. Franek, el hijo de Piotr, el polaco que fue mi compañero de examen de 1er dan. Franek es el que más le cuesta concentrarse, siempre está en la suya y todavía no afianzó los movimientos básicos, lo dejé jugando con Sora y me puse a estirar con Jenny. Después llegó Haruko, una de las nenas más avanzadas, Piotr jugó con ella, pero como es padre experimentado, rápidamente jugó con todos a la vez. Finalmente legaron los últimos alumnos del día, Teipe y Nanoka. Teipe también empezó hace dos años. Iba al Dojo en pañales y era tan tímido que ni si quiera se animaba a formarse con los demás, mucho menos presentarse al grupo (costumbre japonesa), hoy ya graduó dos veces está totalmente integrado. Nanoka es la chica más grande del grupo, seguro estará por abandonarlo y pasar a las clases de adultos de los viernes como otros ya lo han hecho. Con la dirección de Irie-sensei (en las clases de niños nuestros títulos, Irie-kun, Jenny-san, Piotr, Naueru, pasan a ser –Sensei) los hicimos correr en círculos y en zigzag. Después los formamos y que practiquen contar hasta 10 a la vez hacen los movimientos básicos (kihon taisabaki), nosotros como buenos ayudantes los atacábamos con espadas de goma  para que las esquiven y entiendan lo importante que es que se MUEVAN! A continuación un poco de técnica. En total éramos pares, así que los 3 ayudantes nos pusimos uno con cada niño y dos de ellos solos. Para terminar, los ejercicios de cruzar el tatami en dos grupos, por un lado los tres nenes Franek, Sora y Teipe; por el otro las dos nenas, Nanoka y Haruka y uno de nosotros los ayudantes, que nos rotamos. Primero fue Piotr a hacer los ukemis, cuerpo a tierra y saltos, después Jenny a saltar en una pata y correr de costado, finalmente yo a caminar y saltar bajito en canclillas en trencito, y carretilla con flexiones de brazos. Terminada la clase trapearon el piso, yo limpié los trapos y nos volvimos a quedar solos unos minutos. Me reacomodé la hakama, me la ajusté un poco más arriba a ver si no me la piso esta vez.
Empezaron a llegar los alumnos más avanzados del Dojo, los que vienen sólo los domingos. Esperaba verlo a Rui, en filipino, pero no vino. Clase de Igarashi Sensei. Para darle un cierre, o una conclusión temprana al tema de la semana, seguimos con tenkan con resistencia, después buscar la fluidez y aplicar kotegaeshi, ene se momento introdujo una variante que es soltarse de la sujeción simplemente sacando la mano en la misma dirección de la sujeción. Parece que fuera un tirón y el movimiento es como el kata Sanseru (el 6to kata de GojuRyu Karate Do), pero lo explicó con su estilo, no tirar, no usar los músculos frontales como los pectorales o bíceps, usar el lado externo y sale sola la mano. Lo hace parecer tan fácil. Me salió un par de veces. Después vino el momento divertido del kokyunage circular largo, dos filas y nage gira 4 veces antes de aplicar uchikaitenage, es tarea de uke moverse acorde y no quedarse atrás ni chocarse. Después trabajo libre. Lo agarré a Piotr, es grande, fuerte, brazos anchos y es uno de los que me suele ayudar con el tenkan. Trabajamos sobre eso y nos asistió un 7mo dan. Para terminar ronda de kokyunage libre en dos filas.
Saludamos, limpiamos, preparamos el té y yo volví a practicar el tenkan, esta vez con uno de los estudiantes de Meiji, nos asistió un 6to dan esta vez, uno que me cae muy  simpático, un viejo con pelo rapado y violeta que tiene pinta de granjero y anda con un bolso verde pálido militar de los viejos, es un maestro. Nos cambiamos y liberamos el tatami, empezaba la clase de Katori, esperaba verlo a Rui acá, pero Sensei me dijo que se cortó el dorso de la mano practicando Iai-do (alcanzó el grado de Sensei en Katori y usa una katana afilada para el Iai-do y Iai-jutsu (el arte de desenvainar, cortar, limpiar y envainar)). Pero va a estar en el campamento, es el intérprete oficial japonés-inglés.
Antes de Katori bajó Machiko-san y practicó su examen con Jenny mientras Irie-san practicaba el 36 no jo ken awase con la alumna de Katori, ella hizo la parte de ken. Cuando Machiko-san terminó se fue y los tres siguieron alternándose unos minutos haciendo el kata de armas. La liberaron a Jenny y quedaron Irie-san y la otra estudiante de Katori para su clase. Ahora que se decidió por ser profesional tiene que participar de estas clases también. Primero Iai-do y Iai-jutsu, limpiaron y guardaron sus iaito (katana sin filo) e hicieron el primer kata de boken, bo y naginata. Irie-san terminó ahí, la otra alumna, más avanzada, hizo el resto de los katas con Igarashi Sensei. Es increíble verlo moverse, acortar distancias, saltar, girar la cadera a esa velocidad y recordar que hace 2 meses cumplió 70 años.
Irie-san terminó, se cambió y nos fuimos. En el depto apenas organizó algunas cositas y se fue a trabajar. Vuelve tarde. Yo merendé té con galletitas, usé un rato la compu y almorcé ramen frío con ensalada. Después merendé más té con otras galles y actualicé el diario.
Me contacté con Jenny, tuvo una reunión con Sensei de 3 horas hablando del pdf. Estaba necesitando un antialérgico, pasé por el Dojo a darle uno de los que me traje y seguí camino a la estación. Entré al súper y compré una pequeña cena, un desayuno y u almuerzo en descuento, además de algunas cosas para la semana. En el depto cené, lavé el keikogi, lo colgué y me acosté a las 11:15.

martes, 10 de mayo de 2016

129-Hashimoto 04~08/may - de vuelta en Japón!



HASHIMOTO, SAGAMIHARA, KANAGAWA, JAPÓN

SEMANA 1:
04/05 – 08/05


Miércoles 04: recuerdos
Un buen vuelo. No terminé de reclinar el asiento y me alcanzó para dormir. Gran variedad de películas. Vi “Burnt”, “The lady in the Van” y dos episodios de “Family Guy”. Nos dieron un almuerzo, pollo teriyaki con arroz, después un desayuno, un full irish, con salchicha, huevo, panceta, champiñones y tomate. Aterrizamos en horario. Abrí la ventana, Japón nos recibió con una tormenta muy fuerte, aún así la temperatura exterior era de unos 17 grados, para lo que estuve sintiendo estos últimos meses es cálido.
LLegué a Japón
El aeropuerto de Haneda es muy grande, caminar de la puerta a migraciones nos tomó 8 minutos. Tuve que llenar dos formularios, uno por migraciones y uno por aduana, pasé ambas sin complicaciones. Ya le había puesto el sim japonés al teléfono, tengo señal sin Internet, igual que antes. Busqué el tren en Google Maps, compré el boleto y partí. El primer viaje fue hasta la estación Yokohama, en el camino se despejó y empecé a sentir el calor de un día soleado. Cambié de trenes a la línea Yokohama con destino a Hachioji, bajé en Hashimoto. Me acuerdo de todo, las máquinas para salir de la estación, las tiendas, las direcciones, el Aeon, el MiWe, el Starbucks al que tanto Wi-Fi le robé. Las escaleras mecánicas externas, el barrio.
Me habían dicho que Irie-San estaría trabajando y que vaya directo al Dojo. Llegué dos horas antes de lo planeado, el viaje desde Haneda es mucho más corto que desde Narita (el otro aeropuerto internacional). Por la ventana de la oficina de Hashimoto Dojo me saludó Jenny, la organizadora del seminario de Finlandia. Sabía que iría al seminario en julio y que va a rendir el 4to Dan, pero no sabía que iba a ser uchi-deshi el mes de mayo. Sensei me saludó desde la ventana de su casa en el primer piso. Entré al Dojo y él y Machiko-san bajaron. Charlamos los 4 un ratito. Me pasó el parte de los eventos próximos. Por ahora tenemos la primera clase el viernes ya que estamos en la semana dorada y todo está cerrado, después de la clase de la noche del sábado Machiko-san nos va a preparar una cena de bienvenida, el domingo Sensei, Jenny y yo vamos a Kamakura al seminario y exhibición de Doshu, con comida incluida. Hablamos un poco de cómo vamos a organizarnos con los chicos de Argentina que van a llegar a destiempo. Quedé para almorzar con Jenny. Sensei me dio la llave del departamento. Fui por el paseo del río, me gusta mucho. Entré y lo encontré más desordenado que antes y con más cosas. En la habitación / tendedero / living / comedor / alacena / oficina / ropero, había mucha más ropa que antes, un estante del muele donde supe guardar mi ropa hace dos años lleno de comida, esta solia estar en el suelo, ahora hay más. Encontré dos relojes despertadores grandes, una secadora de pelo nueva, una impresora con escáner, una computadora y modem/router de Internet. Irie-san se modernizó. Sabía que le había pedido a Igarashi Sensei ser profesional, lo que implica doblar los esfuerzos y aprender Inglés, también se tiene que amigar con la tecnología. Vacié la valija, dejé lo que no voy a usar, como la campera de abrigo, las bufandas, gorro y guantes dentro y la dejé afuera en la terraza. Me duché y salí de vuelta al Dojo. Jenny seguía limpiando, se había metido sola en una complicación. Además de las tareas de limpieza normales de un uchi-deshi, le ofreció a Igarashi Sensei limpiar las tablitas plásticas de la cortina de la oficina. Parecía un trabajo fácil, pero le tomó 2 horas limpiar un lado de una de las 4 columnas. Si alguien vio la oficina de Sensei sabe lo llena de cosas que está. Le tuvo que sacar una foto y vaciarla. Dejó el trabajo por la mitad y nos fuimos a la estación. Comimos en uno de los restaurantes de máquina, esos que se pide la comida apretando botones y se le entrega el ticket al cocinero. Ella no come carne roja, así que tuvimos que elegir con cuidado. Después de comer nos tomamos un café en Starbucks, invitó ella, café de bienvenida.
Estación Hashimoto
Hace mucho calor, yo sigo con mi jean largo y zapatillas. Volvimos al Dojo y me quedé a ayudarla a limpiar. Entre los dos estuvimos dos horas dándole a las cortinas. Cuando terminamos, yo salí a limpiar las ventanas por fuera y cuando volví a entrar Sensei y Machiko-san estaban jugando con su nieto menor, Haruto, de dos años. Jenny ya había empezado a acomodar la oficina usando la foto que había sacado esta mañana de referencia. Irie-san volvió del trabajo y nos encontramos todos en el Dojo, los padres se llevaron al niño y nosotros nos quedamos hablando de fechas y actividades aikidokas. El domingo 22 vamos a Umegaoka, el Dojo chico donde fui dos veces hace dos años. Seguramente dejemos a los cuatro miembros de Argentina descansar ese día. Quedamos para cenar Jenny, Irie-san y yo esta noche en el restaurante al otro lado del río Sakai. También quedé en entrenar con ella mañana a las 10am, ya que estamos sin clases, vamos a practicar Jo.
El barrio
En el departamento pedí permiso para usar el Wi-Fi, me conecté y terminé de acomodar mis cosas. Tengo las dos mochilas en el suelo llenas de cosas y mi ropa y el equipo de mate en dos estantes del mueble. A las 7 pasamos por el Dojo a buscar a Jenny y caminamos al restaurante. Comimos rico. A la hora de pagar Irie-san nos invitó. Nos separamos en la vereda, ella volvió al Dojo y nosotros dos fuimos al Aeon a hacer compras, yo compré en realidad. Desayuno para mañana y una comida. Sólo tengo 5000 yenes que compré en Dublín y no puedo comprar más hasta el viernes que abren los bancos, además llevaba gastados unos cuantos con el tren y el almuerzo. Volvimos al depto, Irie-san se duchó, yo pasé, estaba muy cansado y ya me había duchado antes. Ya acostado en el futón me arrepentí, me sentía sudoroso y algo pegajoso, no mucho, pero estaba muy cansado, me dormí a las 9:30.


Jueves 05: short
Nos despertamos a las 7:30, desayunamos y se fue a trabajar a las 8:30. Ahora tiene 3 trabajos, uno no me acuerdo, otro es el de antes, cocinero de curry, otro es dependiente en un 7/11 y ahora da clases de Aikido es un Dojo propio, a 20 minutos de Hashimoto los miércoles. No tiene alumnos todavía, así que lo voy a asistir este mes. A las 9:55 fui al Dojo. Tuvimos una sesión de una hora y media con Jenny, trabajamos sobre el kata 36 awase de Jo. Fuimos a almorzar a un restaurante de la estación como ayer. Después un café y al centro comercial. Me prestó plata para que me compre un short, ya que hasta que no cambie plata no puedo. Volvimos al Dojo donde nos despedimos. Ella tiene una clase con Machiko-san a las 3pm por el examen que están preparando. Yo me preparé para escribir, pero dio un palme tremendo. Dormí una siesta de 2 horas casi. Me desperté, ordené un poco el departamento y me puse a escribir. Irie-san legó a las 7:30, más temprano de lo previsto. Charlamos (como pudimos) un ratito, nos duchamos por turnos y cenamos casi juntos. De postre se tomó un café y yo un té con masitas. Después, y mientras seguía viendo baseball (le encanta) se tomó la Guinness que le traje de regalo. A las 11:30 a dormir.


Viernes 06: yenes
Arriba a las 7:30. Desayunamos y salimos juntos a Hachioji, yo preparé la mochila para comprar mis yenes con toda la plata bien separada. Fuimos al banco y esperamos 5 minutos a que abra. Fue increíble. Se levantaron las persianas y todos los empleados del banco estaban de pie esperándonos, todos se inclinaron y nos dieron la bienvenida al mismo tiempo, pero los clientes no saludaron, entraron directamente a hacer lo suyo. Sacamos número y naturalmente, por la hora, nos atendieron primeros. No me pueden cambiar sin pasaporte. Irie-san fue a trabajar y yo volví a Hashimoto, agarre mis pasaportes y volví al banco. En los tramos de tren estoy leyendo “The Pirate Wind”, un libro de crónicas de los asaltos de los piratas en las costas de Borneo y alrededores. Me hace poner en perspectiva al pirata simpático de Disney. En el banco pedí mi número, pero me empezaron a atender mientras estaba sentado en la sala de espera. Llené tres formularios porque vendí dólares, euros y libras. Me guardé unos cuantos euros para cambiar en Suiza en agosto. Fueron muy atentos con migo. Me fui con mis yenes, espero no necesitar más que esto. Son muchos.
Tenía hambre y me tentaba con todo lo que veía, pero dije NO. En Hashimoto entré al supermercado y seguí diciendo que no. Creo haber comprado sabiamente. Sigo sin poder cocinar arroz en el depto. Acomodé todo en bolsas y me senté frente a la laptop a escribir y navegar.
A las 4 llegó Irie-san y se duchó, le pagué el alojamiento y seguí escribiendo hasta que nos fuimos al Dojo.
Llegamos muy temprano, Jenny no estaba, abrimos el Dojo. Íbamos a limpiar pero ya se había encargado ella. Nos cambiamos y esperamos a que lleguen los niños. Sólo 3, raro. La clase la dictó Irie-san. Está más firme que antes, pero su método no parece funcionar aún. Reconocí a los tres chicos. Me gusto verlos crecidos. La clase de las 7 con Igarashi Sensei estuvo concurrida. Vino de visita Recep, que este año terminó su entrenamiento de uchi-deshi de tres años en Kobayashi Dojos. Ahora puede ir a entrenar donde quiera cuando se lo permita el trabajo. Además se sumó una amiga de Pyotr, el polaco y una amiga de Jenny. Entrené con Masaru, Jenny, Recep y Pyotr entre otros. Con ellos quería entrenar.
Sensei volvió a mostrar los círculos uno y dos y el trabajo con el palo simulando ikyo y nikyo, acá tene unos palos cilíndricos específicos para eso. Después de la clase barrimos, aspiramos, trapeamos, preparamos el té y empezó el rito. Masaru Utani al centro a practicar ser nage, todos los que queríamos lo atacábamos para practicar ukemi. Sobre el final intervino Igarashi Sensei y lo corrigió a él, lo que nos hizo trabajar más a nosotros, estuvo muy bien, agotador. Practicamos la caída de espaldas saltando desde iriminage.
Se acabó el tiempo. Nos despedimos todos y nos fuimos. Jenny, sus amigas y Recep fueron a la estación. Irie-san y yo al depto. Cenamos, duchamos, yo escribí, él vio baseball, dormimos.


Sábado 7: cena
Arriba a las 5:15, me comí una tostada y llegamos al Dojo a las 6. Clase matutina. Un poco de mano vacía, un poco de boken. Práctica libre con Jenny y el senpai viejo de la clase. Me dieron la batuta. Elegí shihonage. Terminó la clase y preparamos el té. Jenny y yo seguimos con el shihonage, no le encontrábamos la vuelta para entrar sin exponernos a un golpe en la cara. Sensei nos lo mostró y no pudimos ni reaccionar para acomodarnos y contraatacarlo. Se acabó el tiempo y guardamos la mesa y nos preparamos para irnos.
Irie-san y yo volvimos al depto. Desayunamos y a las 10 volvimos a la casa  de Sensei a ayudarlo a mover cajas de la planta baja al primer piso para hacer espacio. Nos invitó un té de agradecimiento y a las 11 empezamos otra práctica, una extraoficial para repasar el examen de 4to Dan para Jenny y Machiko-san y 2do Dan para mí. Fue muy informal, no, estábamos todos de civil practicando armas. En un momento Sensei y su esposa se fueron y nos quedamos solos los tres. Nuestra práctica se vio interrumpida por la visita de un amigo de ellos. Preparamos la mesa del té, esta vez de oolong frío con galletitas. Media hora de charla en japonés con ocasionales traducciones de Igarashi Sensei y un poco que pude interpretar de su amigo cuando me preguntó por qué empecé Aikido.
Nos volvieron a dejar solos. Jenny y yo nos despedimos de Irie-san y fuimos a la estación a almorzar. Después me acompañó a comprar sobres para billetes y lapiceras. Volvimos al Dojo, ella entró a descansar, quedamos que nos encontramos ahí a las 4 para arreglar la vereda. Llegué al depto a las 2:20, empecé escribir pero me caí de sueño. A las 4 empezamos el trabajo. La rampa plástica estaba floja y sucia, la dimos vuelta, la limpiamos y la ajustamos. Entramos al Dojo y nos preparamos para la clase de las 5. La entrada en calor la dirigió Irie-san. Sensei tomo el mando después de los ukemis, trabajamos sobre el tenkan, como todas las clases. La parte técnica se basó en el shihonage con el que estuvimos renegando con Jenny esta mañana. Durante el té le seguimos dando, algunas cositas vimos. Se fueron todos, los tres uchi-deshis solos otra vez (Jenny vive en el Dojo ahora, por eso es uchi-deshi, yo estoy cerca y actúo como uchi-deshi, Irie-san se decidió por ser profesional, entonces Sensei le está dando caña, lo que lo pone en una situación como uchi-deshi). Jenny y yo nos duchamos y los tres subimos a la casa de Sensei a las 7:40 para cenar. Una comida de bienvenida. Machiko-san preparó una ensalada y nigiris caseros. La comida fue como la de la cena hace dos años, carne, vegetales, pollo y pescado a la plancha sobre la mesa. Muy rico todo. Le di a Sensei su regalo suvenir de Irlanda, una Guinness y a Machiko un imán con una frase para madres. Después de comer levantamos la mesa, lavamos y nos fuimos.
De vuelta en el depto me tiré en el futón a escribir. Nos dormimos a las 11:45.


Domingo 08: Kamakura
Calle comercial de Kamakura
Arriba solo a las 5:30. A las 6 salí del depto, Irie-san seguía en el futón. Me fui con el keikogi y la camisa en la mochila hasta la estación, en el camino desayuné dos nigiris que me llevé de suvenir anoche. Sensei y Jenny llegaron a las 6:40 y nos fuimos a Kamakura. Esta ciudad fue la capital de Japón antes de Kyoto, hace mucho tiempo. Es en un templo aquí donde todos los años se celebra una ceremonia shintoista seguida de una clase de Doshu y una exhibición de las delegaciones, los shihanes y Doshu mismo. Igual que hace dos años, el camino de la estación al templo pasa por la calle comercial. Sensei nos inscribió y nos dio un sobre para poner la plata dentro a la hora de pagar. Este evento incluye una comida con discursos. Jenny por ser la uchi-deshi #1 cargaba la mochila de Sensei, pero en este caso me tocó a mí por ir al mismo vestuario. Nos cambiamos, guardamos su mochila en el locker y nos separamos. A las 9:40 empezó la clase de Doshu. A diferencia de las que dicta en Hombu Dojo, aquí explicó más y no está la costumbre de abrirse para darle espacio cada vez que corrige a una pareja. En la clase vimos mucho kihon, lo básico, el eje central de las técnicas de Aikido. Me pasee por gran parte del tatami practicando con distinta gente. Sobre el final me acerqué a Shirakawa Sensei, con quién entrené hace dos años, me invitó a su Dojo y me hizo participar de sus clases. No lo oude alcanzar, pero le agradecí después de la clase.
Por cruzar el gran Torii
Veinte minutos de descanso, nos reacomodamos las hakamas y empezó la exhibición. Dos bloques, el primero con muchas delegaciones y cerrando el shihan número uno de Kanagawa. Segundo bloque más delegaciones, empezaron a pasar los shihanes. Jenny y yo sabíamos que nos tocaba ser uke de Igarashi Sensei, pero no sabíamos si pasaría algo más o no. Dos grupos antes de nuestro turno, Sensei se acercó, nos dio un uke a cada uno y nos dijo que demostraríamos nosotros 40 segundos y después él 1 minuto. Tuvimos nuestros 40 segundos de fama, después pasamos a ser revoleados por el tatami y se terminó rápido. A Sensei no le gustan las exhibiciones ‘Se muestra, pero no se puede mostrar’, dijo. Pocos grupos después demostró Doshu y con él, el cierre del evento. Todos en seiza formados para el funal de la ceremonia. Después entre todos levantamos el tatami y formamos gradas para la foto grupal.
Tatami en el templo
Empezó la carrera. Jenny a doblarle la hakama a Sensei, yo dársela en el vestuario y cambiarme para alcanzarlo en la recepción. Jenny y yo fuimos al salón de la cena de memoria, por suerte vino a mí el recuerdo. Nos apuramos a entrar, pagamos, nos dieron el suvenir y nos quedamos parados esperando que lleguen los invitados de honor, los shihanes y Doshu. Dos mesas con las personalidades sentadas y el resto parados alrededor de las mesas de comidas. Escuchamos 4 discursos y alguien dijo en voz alta ‘itadakimasu’, que vendría a ser buen provecho, es la señal de que podemos empezar a comer. Igarashi Sensei estaba sentado al lado de Doshu, por lo que tenía gran presión, nosotros estábamos cerca por cualquier cosa que necesite. La comida estuvo rica. El discurso de Igarashi fue el más ameno, como siempre. Nos quedamos hasta que nos echaron. Charlamos con Shirakawa Sensei y su hijo antes d eirnos, aproveché esa oportunidad para darle el regalo que le compré en Irlanda. Muy agradecdo. Esta vez no nos acompañó a la segunda fiesta. Hace dos años fue en un bar sentados en la vereda y tomando café. Esta vez llenamos dos mesas largas en un restaurante y no pararon de tomar desde las 14:30 hasta las 21:00. Pidieron más y más comida también. Sensei me sentó al lado suyo y Jenny en frente. Le estuve sirviendo vino a él y a Seno Sensei, que es el número dos de Kanagawa, Igarashi es el número 4. En frente mío estaba el número 3, pero no recuerdo su nombre. A medida que pasaban las horas los Sensei iban entrando en copas. Tuve la oportunidad de charlar con un australiano, Nigel, que tiene su Dojo en Sydney, me dio su tarjeta y me invitó a ir cuando quiera. También charlé con Ken, de California, pero vive en Japón hace 20 años, me dio su contacto también. Después de la segunda botella de vino, que sólo estaban tomando Seno Sensei e Igarashi Sensei, el primero me aplicó varias palancas al dedo torciendo mi cintura, se puso a explicar Aikido, en la segunda casi me tira sobre Igarashi Sensei. Fue una noche divertida.
Igarashi Sensei dando un discurso
Se hizo tarde, nos fuimos. Guiamos a Sensei hasta la estación, pero él, a pesar de estar tomado, sabía la dirección mejor que nosotros. Subimos al primer tren y se durmió. Cambiamos en Yokohama al segundo tren, ya no daba más, necesitaba la cama urgente. En Hashimoto nos tomamos un taxi para hacerla más rápido. Entró a su casa, Jenny al Dojo y yo volví al depto. Irie-san estaba aún despierto, pero no por mucho. Intercambiamos algunas palabras, yo revisé el teléfono y a dormir.

lunes, 9 de mayo de 2016

128-Dublín 01~03/may - gracias Irlanda!



Dublín 01,02,03 mayo – se termina una etapa

Domingo 01: nada


Me atacó la fiaca. Arriba temprano. Desayuné y Vinny se fue a ver a unos amigos. Quedamos que a la noche volvía temprano y cenábamos afuera a las 8, porque mañana ceno con Gary y después me voy. Todo el día viendo series, videos y tirado en el sillón y la cama. Comiendo un poco y viendo más videos. Vinny llegó tarde, como a las 11pm. No salimos, lo dejamos para el almuerzo de mañana.


Lunes 02: comidas
Antes que nada, a comprar leche. Entonces sí. Me preparé para ver en silencio y tranquilo Juego de Tronos. Para hacerla más rápido preparé un tazón de cereales en lugar del porridge, me senté e inicié el capítulo. Se había bajado mal, lo volví a bajar, por suerte la conexión es buena. Genial y tremendo.
Los tres cocineros
Vinny se despertó, desayunó y se puso a estudiar. Gary me llamó para vernos a las 13:15. Pasamos el almuerzo con Vinny a la cena. Volví a desayunar, vi algunos videos y salí a las 12:00. Pasé por el Dojo a dejar el keikogi viejo. Imprimí los boletos de embarque y me encontré con Gary y Ada en el Spire. Se nos sumaron Ismael, su novia y dos amigos. Charlamos un ratito y nos volvimos a separar, quedamos para almorzar en una hora y media. Nosotros tres fuimos de compras. Ada tenía que cambiar su vestuario, este es un hecho que sucede cada 6 meses, no es una gran compradora. Pasamos por 4 tiendas y compró todo en la última, H&M. Gary me dio el poema. The Buterfly (La mariposa). Lo escribió y después me lo dedicó. Muy lindo, dice mucho. Es de los infrecuentes en su estilo, que suelen ser más tristes o agresivos.
Después de las compras fuimos a la calle Grafton a que Gary se compre lentes de contacto, había perdido uno  estaba medio ciego. Entramos a tomar algo a un bar ahí cerca para esperar que los chicos se desocupen. Se hizo y salimos. Camino al restaurante entramos a una tienda que siempre veo desde afuera y me llama la atención. Si la tengo que describir digo que es hippie bohemia. Quienes la atienden parecen ser los artesanos de varias de las piezas, aunque la mayoría es reventa de otros artesanos. Dos chicas y un chico con un perro. Llenos de tatuajes y piercings, muy amables y conocedores de sus productos, que son de toda índole en el marco de la decoración.
EL restaurante era “El Grito”, uno mejicano recomendado por Ismael, en el barrio The Temple Bar en una callecita saliendo de la plaza. Está al lado del argentino que vende las empanadas gigantes. Los chicos no nos alcanzaron. Los burritos son excelentes, comida fresca de verdad. Terminamos y lo llamamos a Ismael. Estaban en el mismo bar que nosotros hace un rato, malentendido. Los alcanzamos ahí y nos sentamos los 5 a una mesa, los amigos de Ismael se habían ido ya. La pasamos muy bien, nos sacamos fotos y de la charla surgió una posibilidad de trabajo para Ada, que es una gran artista. Ella y Gary volvieron a casa, los tres restantes nos quedamos un ratito más y nos fuimos también. Nos despedimos en El Grito donde pararon a comer. Yo volví al depto sin haber comprado ni el short ni los yenes. Vinny se había ido a la casa de un amigo. Quedamos en encontrarnos de The Temple Bar a las 10. Armé la valija, dejé lo que no me llevaría en una bolsa azul en el ropero y me hice un burrito de arroz, papa y queso.
Los compañeros de cuarto
Ya en el barrio antiguo, donde lo encontré a mi compañero de cuarto, empezamos a buscar donde cenar bien, sentados y por menos de 10 euros. No lo logramos, pasamos por varios restaurantes, finalmente entramos al Elephant Castle, elegante y accesible, para lo que son los precios de los restaurantes. Él pidió una hamburguesa grande y yo un sánguche de atún. Muy rica la comida. Él quería que sea una noche especial por ser la última que tendría en la ciudad. De vuelta en el depto Antonio estaba por salir, nos invitó, pero nos quedamos. Terminé de cerrar todo y a dormir a la 1:30.


Martes 03: thanks
Apagué ambas alarmas y salí de la cama a las 4:55, lo desperté a Vinny, me vestí y salimos. Me abrió la puerta de calle y nos despedimos por última vez.
Con el experto en calles
La caminata a la parada del micro la compartí con otra inquilina de nuestro bloque de departamentos, se iba de vacaciones a Rumania. Esperamos 5 minutos y después media hora de viaje. Despaché la valija, pasé por seguridad y compré los últimos regalitos, un pack de Guinness y una caja de Irish Fodge, unos dulces muy ricos locales. Entré al VIP a desayunar. Al vuelo salió a tiempo, abordamos a las 8:25. El asiento era algo incómodo, pero fue sólo poa un viaje de una hora y media. Aterrizamos en el aeropuerto de Heathrow, Londres. Es grande, después de pasar seguridad, caminar hasta el tren que me nos llevó a las puertas y encontrar la B39, sólo esperé 15 minutos. Por suerte no estaba muy justa la combinación.  Pasé el chequeo de documentos y subí al avión por la manga. Como es internacional y largo, el avión es grande y espacioso, viajé por British Airways. Vi los primeros asientos y me parecieron muy grandes, recordé que la primera tanda es primera clase, la segunda es ejecutiva, ya con forma de asiento cómodo, no casi cama como los anteriores. Después vinieron unos también bastante anchos y espaciosos, seguí avanzando hasta encontrar los míos, clase turista, pero ya estaba en la fila 30, levanté la vista para llegar al final de la nave, estaba en turista ya. Me sorprendió lo cómodos que son. Me senté y estudié el programa de entretenimiento. Elegí mis películas.
Se encendieron las turbinas y el piloto nos dio la bienvenida al vuelo. Se empezó a mover, se posicionó frente a la pista y sentí la presión del despegue, otro vuelo largo empezaba. En 11 horas, o 19 si tomamos en cuenta el cambio de horario, aterrizaría otra vez en Japón. Me despido de Europa y dejo atrás a muchas personas que me hicieron muy feliz y de quienes aprendí tantas cosas. Ahora es hora de pensar y vivir en Aikido.


Fin de Dublín