Dublín 28,29/12 – preparativos festivos
Lunes 28: planes
¿Voy o no voy
al bar? Antes de Navidad me dijeron que hoy me llamarían para confirmarme si
iba o no y a qué hora. No sabía qué hacer, tenía que estar listo para salir en
cualquier momento. Ante la duda puse un episodio de Vampire Diaries. Vi unos
cuantos y seguía sin información del bar. Almorcé, vi otro capítulo y le
escribí a Gary, al ratito me llamó para que vaya a las 4, se lo escuchaba menos
animado que de costumbre. Cuando llegué lo encontré para atrás, estaba
resfriado y descompuesto. Lo relevé y se fue a la casa en el micro de las 5:15.
La cena estuvo muy tranquila, preparé pocos platos, hice puré de papas y
limpié.
Cuando salí, y
antes de volver a la a casa, me puse a buscar bares en el centro para pasar el
31 a la noche. Vienen de visita Álvaro y Cecilia y queremos pasarlo en The Hole
in the Wall, pero está muy lejos de todo como para deambular por la zona en
caso de no poder sentarnos a cenar. Lloviendo medio fuerte, estaba cansado, más
bien achanchado por la falta de actividad del día, y hacía frío. No busqué
mucho, me decidí por llamar a los que conozco y reservar. Me crucé una pareja
que me pidió indicaciones para llegar a su hotel, ni idea dónde está, pero lo
busqué en el teléfono y les mostré, me dijeron que estaban en auto, así que les
tracé una ruta diferente, nos despedimos y se fueron en la dirección opuesta a
la que me habían dicho que estaban estacionados.
De vuelta en
la casa me tiré en el sillón del living y llamé a The Hole in the Wall, el
salón comedor está reservado completo pero podemos ir a esperar al bar a que se
desocupe una mesa, The Brazen Head no reserva, lo mismo que el anterior, a The
Temple Bar ni lo llamé. Nos decidimos por The Brazen Head.
Me metí en la
cama con mis vampiros y sus dramas y a dormir.
Martes 29: bienvenido
Al bar de 11 a
16, salí directo al hotel de los chicos, los muy muertos de hambre estaban en
Tesco, los esperé en la recepción. No los veía desde septiembre, nos fuimos a
pasear por O’Conel Street, les mostré The Spire, la escultura de James Joyce,
la tienda Carroll’s y la peatonal de Henry Street. Cenamos en el mismo bar donde
merendamos con mi tío, ellos pidieron hamburguesas y yo arroz con curri de
vegetales. Como es la costumbre con esta pareja feliz, nos tomamos un helado.
Cuando surgió la idea me vinieron recuerdos de Bath, esa tarde entramos en al
menos dos heladerías. En el Spire nos despedimos y planeamos los próximos días.
Mañana ellos se van a una excursión guiada
a la costa Este y yo trabajo todo el día, el jueves nos encontramos en The
Brazen Head alrededor de las 5:30, el primero que llega ocupa una mesa para
tres, el viernes vamos temprano a ver ciervos al Phoenix Park y al bar The Hole
in the Wall, el sábado vuelvo a trabajar y nos mensajeamos, el domingo vamos
los tres a un tour por las montañas de Wicklow.
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