Vivir no es sólo existir

Hola todos, gracias por leerme y así acompañarme en este viaje. Cuando me fui por primera vez lo pensé como un 'voy y vuelvo'. Algo finito, aunque largo. Hoy veo que estoy viviendo esto y después estaré viviendo otra cosa. Viajo para conocer lugares, costumbres, horarios, comidas, ritmos, gente, calles, Dojos, maestros, compañeros, trenes, redes de metros, culturas.
Hoy el objetivo del viaje, si bien tengo un plan sobre el que improviso, es viajar. Si es posible trabajar en distintas ciudades para, 1) financiar el viaje y 2) entrar bien en el ritmo local, no ser sólo un turista más.
Este texto lo voy a expandir en la entrada 'Inicios y Motivaciones'

lunes, 15 de febrero de 2016

098-Dublín 11~14/feb - un análisis,estoy pensando mucho?



Dublín 11,12,13,14/02 – vivir la vida

Jueves 11: videojuegos
Una mañana escribiendo hasta las 11:20, pero antes de irme reinventé el helado. Puse los dos potecitos que me quedaban de vuelta en la sartén, pisé la banana una vez que se calentó lo suficiente y formé una masa pastosa, los volví a meter en los potecitos y al freezer. Esta vez salí a tiempo, suelo salir a las 11:30 y termino trotando un tramo del camino. Llegando al bar le mandé un mensaje a Gary a ver si necesitaban algo del súper, así no me mandan después. No, sólo chocolate, el combustible del cocinero. A las 2:30 ya estaba todo calmado, lavé, sequé y guardé los platos de la barra, le saqué los pedazos de comida a la vajilla de la pileta de la cocina y me fui a las 3. Fui a la biblioteca a buscar el libro de Rosie, la hermana de Gerry, de Limerick, la mujer que de los 55 años a los 60 cruzó Rusia y Europa trotando. No lo tenían ahí pero me lo encargaron, cuando llegue me mandan un mail. Pasee por los estantes buscando algo interesante, encontré un libro sobre críticas a escritores, lo empecé a leer y cabecee, está calentito ahí, y cómodo. Saqué mi cuaderno de práctica de escritura y japonés y con una imagen de los hiraganas y katakanas me puse a practicar. Volví a cabecear, guardé todo y me fui a dar una vuelta. Fui hasta el cine donde vi The Revenant, leí la cartelera en busca de las funciones para Deadpool y Zoolander 2, serán la semana que viene, aunque puede que la primera la vea mañana a la noche, Gary me dijo que la va a ver el sábado y que está prohibido hablar del tema si la veo antes que él.
Me metí en una juguetería inmensa y encontré una versión de Juego de Tronos del T.E.G., que acá se llama Risk. Me encantó, pero me pareció raro que sólo tenga 5 ejércitos (casas, ya que está orientado en la serie), para elegir, deberían ser 6 al menos. Fui al sector de videojuegos y probé uno para la consola Nintendo WiiU que le tenía ganas hace rato, Hyrule Heroes. Basado en la saga de The Legend of Zelda. No me convenció. Es un formato standard de rol en el que elegís uno de los personajes de la saga y tenés que avanzar por el mundo matando criaturas que te dan puntos de experiencia mientras que otros personajes de la saga te dan misiones, no tiene modo multijugador. Yo me enamoré de esta saga por el estilo de juego de aventuras y pruebas de ingenio, esto es un rpg de baja dificultad en la que te la pasas masacrando montones de bichos débiles para subir de nivel. Ojo, que sólo jugué unos minutos la versión demo. También le di una oportunidad al Mario Kart 8, recuerdos de la infancia, buen juego. Tampoco me convenció tanto, pero los seguiría jugando.
Volví al bar a las 6. Gary había limpiado las paredes del cuarto de la pileta, Alan estaba apostado a la barra con su pinta y Phil estaba encargado del bar. Lavé todo, Gary ordenó la heladera del sótano, yo le hice el servicio a la trampa de grasa y me fui a las 7:45 directo a casa. Me puse los auriculares, busqué las carpetas de música y reproduje un álbum de Guns n Roses, empezó Sweet Child o Mine. Enseguida la música me atrapó y la dejé que me guíe a casa. Estaba cruzando una calle y cuando bajé del cordón me di cuenta que estaba mirando el piso, sólo por el instante de cambiar la altura, pero dejé de ver al frente por un segundo. Me propuse mantener la vista paralela y practicar visión periférica, que se supone todos los conductores deberían tener. Me atacó un pensamiento: podría hacer mejor las cosas en el trabajo, podría moverme más rápido. Qué me falta para eso? Como siempre trabajo por poco tiempo y con fecha definida para irme nunca le pongo todas las ganas. Pero, como me decían cuando iba a la escuela primaria, si vas a ir de todas formas, por qué no aprovecharlo? Claro, yo elegí quedarme acá para trabajar y ahorrar. Aunque sepa que me quedan dos meses y medio para irme del país y no trabajar más en la cocina, puedo ponerle toda la onda que se merece. Dar todo, comprometerme en serio con el trabajo. Hacer que me importe a nivel personal el resultado del trabajo y no sólo una excusa para que me paguen el fin de semana.
Llegué a la casa contento escuchando a los Guns, el agua de la ducha estaba caliente y no había nadie en la cola, genial. Ducha y a la pieza. Me puse al día con el diario, vi un capítulo de la serie y a dormir.

Viernes 12: Deadpool
Hoy fue una mañana relativamente productiva. Me levanté a las 8, desayuné y puse el diario al día, no llegué a estudiar japonés. Quedé con Vinicius que a la noche vamos a ver Deadpool al cine. Dependíamos de su tarjeta de socio. Si seguía vigente íbamos a Cineworld porque él entra gratis y tiene descuento en la comida, si no íbamos al Savoy que es más temprano. Camino al bar compré crédito y empecé a trabajar a las 11:55, Gary estaba contento por que llegué temprano. Estuvimos un rato con la pileta llena de platos sucios desordenados, siempre había algo que hacer. En mi ratito libre vacié las dos cacerolas de aceite que usó Phil anoche para limpiar las freidoras en un bidón vacío. Choree bastante y dejé una capa de aceite espesa en el suelo del sótano. Seguíamos en el servicio, no había tiempo de encargarse bien del asunto, corrí los bidones y cubrí el charco con cartón. Cuando los clientes desaparecieron volví al sótano para cambiar los cartones y limpiar el filtro de la trampa de grasa.
A las 5 se fue Gary y me quedé para cerrar, a las 7:45 terminé y me fui directo al cine. Vinícius tiene su tarjeta vigente y dijo que él se encargaba de comprar las entradas para estar los tres juntos (se sumó Vinny). No las pudo reservar así que las compramos en la boletería, la función de las 9:30 estaba casi agotada y no quedaban butacas juntas, compramos para las 10:30 y nos fuimos a dar una vuelta. Nos sentamos a charlar en un McDonald’s hasta que se hizo la hora. El tema principal fue aprender inglés y distintos enfoques del estudio.
Otra vez en la sala 9, la misma en la que vi The Revenant, es de las grandes. La película estuvo buena, nos reímos bastante, es un buen personaje y estuvo bien logrado. No doy detalles porque sigue siendo nueva. Llegamos a la casa a la 1:30am, estaba tan cansado que me olvidé de lavar la ropa y me acosté directamente.

Sábado 13: vampiros
Esta mañana Vinny me acompañó a Aikido, para ver la clase. A las 10:30 estaba por empezar y lo llamó un amigo, se había olvidado que había arreglado para juntase. Se fue a los 15 minutos, llegó a ver parte de la entrada en calor nomás. Esta vez hice la clase completa y me sobró tiempo para charlar un ratito con los chicos de Jujtsu.
Salí directo para el centro con la idea de asistir a la conversación de japonés en la biblioteca. Se me ocurrió variar el camino, me perdí, se me hizo tarde y terminé vagando por el centro un rato hasta que se hicieron las 2 que entré al bar. Como era de esperar, estuvo tranquilo, en el desayuno Gary preparó 25 platos, hasta las 5 que se fue preparamos en total unos 22, y hasta las 7 que cerré la cocina no preparé nada más, ni un cliente. Sólo una ensalada para Phill. Me pagó la semana y volví a casa. Me preparé para lavar la ropa y me tiré a ver la serie. Tenía el plan de ir esta noche a Malahide y dormir en un hostel, o de ir mañana a la mañana en tren o caminando, pero llegué cansado y sólo quería relájame. A las 11:20 fui al baño a cargar el lavarropas pero alguien lo estaba usando ya y había puesto el programa largo, volví a la serie y después de dos capítulos se terminó el ciclo, puse mi ropa, vi dos capítulos más y a dormir.

Domingo 14: caminata
Cuánta fiaca! Me desperté a las 8, colgué la ropa de anoche en el tendedero en el living y puse a lavar los keikogis, volví a la cama y me levanté a las 10. Preparé el desayuno mientras colgué la segunda tanda de ropa en el mueble del termo-tanque y desayuné sin tecnología. Hoy, ya que había cancelado Malahide, íbamos a ir con Vinícius a pasear por el parque Phoenix y a almorzar en el mercado que está pasando el parque. Pero él no estaba en la planta baja, volví a la pieza con algunos dulces y agua y me clavé a ver la serie. A la una, y ya casi terminando la temporada 6, fui a cocinarme algo, estaban Vinícius y Tomo, todos en la misma. Mientras cocinábamos salimos a sentir el sol, estaba despejado y no demasiado frío, hasta hice un poco de jardinería y encontré papas. Me hice una sopa y la acompañé con tostadas con manteca. Vinny volvió de su encuentro con sus amigos, almorzó y se fue a dormir, no estaba para acompañarnos en la caminata.
Salimos tarde, ya no había tiempo de ir al parque, caminamos por los distintos centros y charlamos unas cuantas horas. Paseamos por las calles Talbot, Henry, O’Connell, Parnel, por la rivera del Leaffy y terminamos en el mismo pub en el que con mi tío nos tomamos un té con torta, y donde con Álvaro y Cecilia cenamos, esta vez pedimos dos cafés, me pareció extraño que no nos hayan preguntado qué café, nos llevó dos tazas bien grandes con un rico café negro caliente y un tarrito de leche. Ahí nos quedamos charlando una hora. Después media hora caminando de vuelta, cenamos y me recluí en la pieza a terminar la temporada 6 de Vampire Diaries.
Los temas que tocamos en la caminacharla fueron muchos y creo poder resumirlos.
Hay una vedad que se nos niega, algunos iluminados la encontraron, la transmitieron y le abrieron los ojos a muchos, pero, a su vez, algunos que vieron la verdad la escondieron detrás de máscaras como la iglesia, la división política del territorio, las naciones, el capitalismo. Esta vedad es que todos los seres de este planeta estamos conectados y dependemos de cada uno de los otros. Ninguno es más importante, no existe una especie dominante, sólo una especie que en su propio e individual razonamiento cree ser superior al resto. Matar o perjudicar a otro ser vivo por razones de ideología o por las demandas del mercado nos conduce a la autodestrucción. La humanidad empezó a abrir los ojos hace varios años, el régimen discriminatorio hacia personas nacidas en otros lugares del globo y hacia las mujeres se encaminó hacia la igualdad. Los cambios positivos fueron muchos en el último siglo, y comparados con los miles de años que duró el otro régimen, estos tremendos cambios en menos de 100 se pueden considerar un gran progreso. La tarea sigue, claro, y uno de los cambios fue que la gente ya no ve a los que hablan del buen vivir como gurús estafadores disfrazados de autoayuda, sino a varios de ellos los están escuchando, están haciéndose conocer, están concientizando, la gente están escuchando otras campanas. A pesar de todas estas buenas noticias, el sistema consumista y autodestructivo que creamos es muy hábil e inteligente, sabe adaptase y entiende que aplastar no es la única manera de combatir la crítica, así que logró adaptarse a estas nuevas tendencias dándoles a los oradores y escritores medios de comunicación como YouTube, páginas web, Facebook, blogs, programas de televisión, etc. Todo lo que pide el sistema a cambio es pagarles, darles dinero y fama, ego, en resumen, proporciona distribución a cambio de cadenas.
Sigo creyendo que en general estamos mejor.

Otra cosa:

Vivir el momento es difícil, el pasado y el futuro siempre aparecen en nuestros pensamientos. Pero creo en un método infalible, el arte. Cuando un músico toca una melodía, cuando un dibujante traza sus sensaciones en un papel, cuando un bailarín se deja atrapar por el compás de la música, cuando un escritor se convierte en presa de su propia imaginación; estos momentos son puro presente, no se puede lograr el arte sin estar aquí y ahora.
Por muchos años las facultades más prestigiosas, esas a las que los padres quieren que sus hijos vayan, fueron la de economía, derecho, arquitectura, medicina; y las menos prestigiosas fueron las de arte, música, pintura, dibujo, escultura, danza, teatro, literatura. Creo que si los estudiantes de estas últimas asisten por el verdadero placer y devoción al arte, el mundo se llenaría de gente que entiende qué es lo importante, y qué es una ilusión del mercado.

2 comentarios:

  1. The Legend of Zelda y Mario Kart... que epocas.. jaj
    abrazo Nahu!

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  2. Me hacías pasar todo el templo para que vos después le pegues al jefe, pobre de mí. Un abrazo Juani

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