Franco inesperado, arriba a las 8 y me pongo con el texto de Patricio, claro que antes me hice mis tostadas con manteca y cantimpalo acompañadas de un café con leche. Terminada la corrección salí de la habitación para ir a Stratford Centre a cambiar la laptop por otra, una que se conecte a Internet. En el living estaba Redone. Me comentó del nuevo plan de Opu, Ali también comentó un poco. Bueno, ya volverá Opu hoy y me lo contará, por lo pronto le escribí para decirle que Whitechapel me queda bien.
Quise vender mi compu en una tienda de compra-venta, es muy vieja y no la compran, fui a otra y lo mismo, pero en esta trabaja Cristian, el primer rumano que conocí en la casa. Le mostré las dos laptops que me gustaban y me recomendó la más barata, resultó ser muy buena. Ahora tengo las dos. Me quedo con la nueva y la vieja se la doy a Cristian para su sobrino, estoy entre reglársela o cobrarle unas simbólicas 20 libras. Yo la pagué 150 euros, cómo me cagaron! Para comprar la buena acá gasté dos regalos de cumpleaños.
Nomás llegar la conecté y acomodé unos detalles del blog, ahora hay una barra de etiquetas para buscar los textos por tópico. No tenía office, me puse a descargar y no encontré la forma de hacerlo, anteriormente pude, no sé que me pasó ahora. Juani me recomendó usar el Open Office. Funciona, no me acostumbro todavía me falta alguna función, o no sé donde están. Pero ya puedo editar documentos de Word y Excel.
Apareció Opu. En la habitación de al lado duermen Redone y Ali. Redone se va Barcelona el 15, vuelve el 20 y se ve el 21 a su casa nueva. Ali se va a trabajar todas las noches a las 8:30 pm y vuelve a las 7:30am. Así que me deja dormir en su cama de noche si se la dejo lista antes de las 7, cosa sencilla ya que suelo irme a las 6:30 a más tardar. Además sería por 5 días, y dos de esos voy a dormir en Southampton. De todas formas esta noche voy a la reunión de SpeedFlatmating a ver qué consigo más cerca del centro norte.
Estuve chateando bastante hoy, después de comentar con mis amigos no latinos me decidí por hacer el blog también en inglés. Ya está la plantilla, falta colgar textos. Hoy no salí después de comprar la laptop, estaba a la espera de una solución. Pensaba ir a un Dojo inclusive, pero no. De hecho, me convencieron de quedarme acá. Está lejos del trabajo y el centro, pero me gusta pedalear. Tengo algunos Dojos cerca que no probé aún, es barato y me sirve para el ahorro. Los compañeros son o buena onda o soportables. Y para coronarlo, me voy de Londres en 42 días.
A la noche mientras cenaba me llegó un mensaje de Geoff, mañana no trabajamos, se va a quedar cuidando a Kelly en el hospital. Nos vemos el jueves a la mañana. Le dediqué un rato a la noche a instalar Office 2007, se pudo al final.
12/8 – miércoles – malcriado yo mismo
Arriba a las 6 pm. El plan: pedalear a un parque, meditar, practicar, comprarme la comida, volver y escribir. Pero resulta que mientras escribía llegó Ali del trabajo. Surgió una charla sobre Reiki. Él lo practica desde hace 16 años y es un gran promotor de la disciplina. Si bien esta es conocida por sus aplicaciones curativas y anti-estrés, los fundamentos y técnicas del Reiki son mucho más amplios. Llegó a interesarme, le pregunté si me podría enseñar y me dijo que primero lea todo lo que pueda de Google y después busque un maestro dispuesto a enseñarme. ‘Te puedo enseñar A, B y C, pero si no sabés de antemano que esas tres cosas son letras comprendidas dentro de un alfabeto, que al combinarlas se crean palabras y posteriormente frases y un lenguaje, ¿De qué sirve que aprendas A, B y C?’
Con esta moraleja apagué la PC (claro que ella no quería, instaló actualizaciones de Windows). Cuando terminó se reinició y lo volvió a hacer, que no apague el equipo. ¡Hecho! Lo hiberné. Tomé la bici antes de arrepentirme y me fui. Ali me recomendó ir a la Speacker’s Corner, la famosa esquina de Hyde Park donde la gente puede decir lo que quiera de quien quiera. El abuelo Néstor me contaba de cuando se subían a un banquito para no pisar suelo británico y despotricaban contra la Reina.
Elegí una ruta en el gps, la que me obliga cruzar dos puentes. Primero en Tower Bridge, Crucé el castillo Tower of London (Ese que nos quedó pendiente en marzo). Tomé la primera calle a la derecha hasta el inicio del London Bridge porque leí en el mapa Borough Market. Recordé que la semana pasada, charlando con Geoff en el auto, hablamos de la pastelería argentina y busqué en Google dónde conseguir acá. En el mercado me puse a escanear cada nombre. Había comida típica de Turquía, India, Alemania, México, Italia y al menos 5 países más, varios repetidos. Encontré ‘La Porteña’, una panadería argentina, tenían empanadas, dulce de leche, vigilantes, conitos de coco, alfajores Havana y Cachafaz, yerba Taragüi y demás. Les compré hablando en argentino dos vigilantes, un cono de dulce de leche y hojaldre y una empanada de carne.
Subí a la bici y fui derecho a Hyde Park, el tránsito estaba tan congestionado que caminando por la vereda llegaba junto con los autos a los semáforos. Igual que la última vez que estuve aquí, necesitaba urgente un baño. Terminé en el mismo bar, ese que hay que rodearlo por detrás, donde fuimos con Ornella y Fermín. Recuerdos por aquí, recuerdos por allí. Me senté en una reposera de tela y me preparé el mate mientras le entraba al primer vigilante (la factura). En eso aparece un tipo con chaleco verde. ‘1,60 la reposera’, este era de los que no tenían incorporado el ‘por favor’. Estaba dulce, así que le pagué.

Desayuné por segunda vez, la empanada lo hizo medio almuerzo, y leí bastante. Hasta que me dormí. De ahí pedalee a la Speaker´s Corner, nadie estaba orando nada. Mientras me compraba un helado y un café (combinación que incorporé en Japón) le pregunté a la chica por la esquina. Me dijo que sólo vienen a hablar los domingos. Leí más tirado en el pasto.
Volví por Oxford Street. ’Por acá seguro encuentro una librería’. Me dije. Pero la cantidad de gente era tanta que no se podía caminar tranquilo, me mudé a una calle interna y consulté el gps. Compré dos libros cortos de filosofía y uno de crónicas de piratas rescatadas de los puertos de Malaya. Al salir se me murió el cel. Volví de memoria y funcionó. Mentira parece. Bien, ducha rápida, lavé la ropa, armé la mochila y fui al único Dojo más o menos cerca que con clase a las 8, a 35 minutos de bici, que fueron 45.
Pertenece a Iawama Ryu, el Sensei fue alumno de Morihiro Saito Sensei y hoy lo siguen a Inagaki Sensei. Trabajamos sobre un agarre firme y fuerte, buscando relajación de los músculos. Hacía rato que no hacía esto, tanto que me olvidé de cómo sujetar fuerte y me lastimé el hombro izquierdo. Duele un poco, pero se puede usar. Después fuimos a un pub a tomar algo, son bastante menos animados que los españoles estos. No debí haber ido sabiendo que madrugaba. El cel volvió a morir y yo me pasé del giro a la izquierda, pedalee una hora en total y me acosté a la 1 para despertarme a las 6. Pudo haber sido peor.
Que bien aprovechados los días de descanso. Espero con ansias los relatos desde southampton.
ResponderEliminarAbraaaaazo
Bien ahi con el office! igual sigo insistiendo en que el openoffice es mejor... es gratis y libre...
ResponderEliminarabrazo!